Fracasaron las negociaciones y podría haber paro de colectivos


La Unión Tranviarios Automotor (UTA) y las cinco cámaras de empresarios del transporte no se pusieron de acuerdo durante una nueva audiencia de conciliación llevada a cabo este jueves en el marco de las discusiones paritarias.

A raíz del fracaso de las negociaciones y de no mediar un giro de timón en las próximas horas, se estima que el próximo martes 13 de junio el gremio decretará un paro de colectivos nivel nacional.

Minutos después de llevada la nueva audiencia en el ministerio de Trabajo- las partes la consideraban como la última chance para desactivar la medida de fuerza latente- la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), una de las cámaras que forma parte de la discusión afirmó que “no hubo avance alguno”.

En un breve comunicado, los empresarios apuntaron a las autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación por “la nueva ausencia” a la audiencia de mediación en la que se esperaba la presencia de representantes de la cartera para la rediscusión de los subsidios al transporte.

“El gremio realizará un paro nacional desde las 00 horas del martes 13/06/2023, no aceptando más dilaciones, al menos que haya una solución ante de esa fecha” alertaron los empresarios.

Desde el sindicato ratificaron la medida de fuerza y alertaron que “fuera de la audiencia no hubo ningún ofrecimiento a las cámaras y tampoco a UTA” expresaron.

Finalmente se fijó una nueva audiencia el lunes a las 16 en lo que significará el último intento por desactivar el paro de colectivos.

El reclamo de los choferes

En el marco de las negociaciones, la UTA reiteró el pedido de un salario básico para abril de 262 mil pesos más una suma fija por única vez de 32 mil pesos.

Para mayo quieren elevar al salario a 282 mil pesos y de 320 mil pesos a junio.

La ampliación y reevaluación de los pedidos para los meses siguientes implicarían un salario básico de 348.800 pesos en julio, de 380,192 en agosto y de 414 mil pesos en septiembre.

En tanto, las empresas volvieron a pedir la asistencia del estado para las empresas del AMBA tanto en la recomposición de los costos salariales como de los no salariales y alertaron sobre los riesgos del agotamiento “inminente” del periodo de conciliación obligatoria que vence el 12 de junio.